Autor: ExpokNews
Fecha de publicación: 30 agosto de 2024
Palabras claves: pobreza, implementar, inclusión laboral, innovador, empleo.
El estado de Nuevo León ha implementado el primer Bono de Impacto Social (SIB) en México, dirigido a jóvenes de 18 a 24 años que enfrentan barreras como la pobreza y la exclusión social. Este mecanismo financiero innovador tiene como objetivo reinsertar a estos jóvenes en la educación formal y en el mercado laboral, garantizando su retención en empleos formales por periodos de 4 y 9 meses. La iniciativa fue anunciada por el gobernador Samuel García Sepúlveda, la Secretaria de Igualdad e Inclusión, Martha Herrera, y Beth Collins de Catholic Relief Services (CRS). CRS, junto con YouthBuild México, liderará el programa durante 28 meses, esperando alcanzar a 500 jóvenes, con el objetivo de que al menos el 60% de ellos consiga empleo formal. El éxito de esta iniciativa podría llevar a su expansión en otras regiones de México y América Latina.
Comparación
1. Implementación de Bonos de Impacto Social en Otros Lugares
Reino Unido: El primer Bono de Impacto Social del mundo fue implementado en 2010 en Peterborough, Reino Unido, con el objetivo de reducir la reincidencia criminal. Similar al proyecto en Nuevo León, este bono fue un mecanismo de financiamiento que dependía de resultados medibles para liberar los pagos. El éxito en la reducción de la reincidencia llevó a una mayor adopción de este tipo de bonos en el Reino Unido y otros países europeos.
Estados Unidos: En varias ciudades de Estados Unidos, se han implementado Bonos de Impacto Social enfocados en educación, salud y rehabilitación social. Por ejemplo, en Nueva York, se usó un SIB para financiar programas de educación infantil temprana, con el objetivo de mejorar los resultados educativos a largo plazo y reducir la necesidad de servicios especiales costosos.
2. Programas de Inclusión Laboral y Juvenil
España: Iniciativas como la Garantía Juvenil en España, financiada por la Unión Europea, buscan integrar a jóvenes en el mercado laboral a través de programas de formación y empleo. Aunque no se estructuran como bonos de impacto social, tienen metas similares, como reducir el desempleo juvenil y mejorar la empleabilidad.
Chile: En Chile, se ha lanzado el programa “Chile Joven”, que también busca mejorar la inclusión laboral de jóvenes en situación vulnerable. Aunque no usa un mecanismo financiero como el SIB, se basa en la colaboración público-privada para brindar formación y oportunidades laborales, con un fuerte énfasis en la medición de resultados.
3. Enfoque en Resultados y Colaboración Intersectorial
Colombia: En Colombia, iniciativas como "Empleo para la Prosperidad" combinan esfuerzos gubernamentales con el sector privado para crear empleos formales para jóvenes. Aunque no utilizan Bonos de Impacto Social, el enfoque en resultados y la colaboración intersectorial es similar a la estrategia adoptada en Nuevo León.
México (otros estados): En otros estados de México, como la Ciudad de México, se han lanzado programas enfocados en la inclusión laboral juvenil, como "Jóvenes Construyendo el Futuro". Este programa, aunque más amplio y financiado directamente por el gobierno, también apunta a mejorar la empleabilidad de los jóvenes, aunque sin la estructura de pago por resultados que caracteriza al SIB de Nuevo León.
Conclusión
El Bono de Impacto Social de Nuevo León destaca por su enfoque innovador y su estructura basada en resultados, que lo diferencia de otros programas tradicionales de inclusión laboral. A nivel global, aunque el uso de SIBs ha sido más común en Europa y Norteamérica, el caso de Nuevo León es pionero en América Latina, posicionando al estado como un referente en la implementación de mecanismos financieros que buscan resolver problemas sociales complejos. La comparación con otros programas muestra que, mientras muchos comparten objetivos similares, la innovación en financiamiento y la medición de resultados dan al SIB de Nuevo León un enfoque distintivo.
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